Luego de una vibrante carrera en Jeddah, el finlandés finalizó 1 puesto por debajo de donde largaba, tras luchar con Daniel Ricciardo y Esteban Ocon.
En estos momentos, en los que Lewis Hamilton (Mercedes) está declarando ante los comisarios deportivos tras la vibrante carrera en Arabia Saudita, las emociones y rostros en el box del equipo alemán deben ser variopintos. Sin embargo, el GP de Valtteri Bottas permitió a la escudería alemana dar un golpe sobre la mesa en el campeonato de constructores, que ahora se inclina hacia la defensora del título.
El finlandés largaba desde la 2° posición, y mantuvo su puesto en la salida, defendiéndose de Max Verstappen (Red Bull). Cuando el holandés comenzaba de a poco a recortar la distancia en las primeras vueltas, tuvo lugar el primer accidente de la carrera, cuando Mick Schumacher (Haas) perdió el control de su monoplaza en la curva 21. Ésto causó, en primer lugar, la entrada del coche de seguridad. En ese momento, los ingenieros de Mercedes hicieron entrar a los pits a sus dos pilotos, quienes quedaron por detrás de Verstappen. Sin embargo, la carrera fue suspendida instantes más tarde, lo que jugó como una gran desventaja para el equipo alemán.
Cuando los daños a las protecciones fueron reparados, se reinició la competencia, con Verstappen en primer lugar, seguido de Hamilton y el propio Bottas. Por detrás de Valtteri se ubicaba Esteban Ocon (Alpine), quien en la curva 1 adelantó al finlandés. De hecho, el francés pudo llegar al primer puesto tras un incidente entre los contendientes al campeonato Verstappen y Hamilton.
Con el afán de mantenerse alejado de los problemas en la primera frenada, Bottas desaceleró y perdió una plaza con Daniel Ricciardo (Mclaren). El australiano largaba con neumáticos blandos, caso contrario de los líderes quienes habían empleado los duros. El sobrepaso ocurrió justo antes de que por detrás colisionaran Sergio Pérez (Red Bull) y Charles Leclerc (Ferrari), causando la segunda bandera roja del día.
En el segundo relanzamiento, Bottas no pudo hacerse con el lugar de Ricciardo, y se quedó detrás del piloto de Mclaren hasta el giro 40, en un circuito que ha probado ofrecer muy pocas oportunidades de adelantamiento. Sobre las vueltas finales, y en la misma condición de neumáticos, el finlandés comenzó a recortarle tiempo a Ocon, girando con aire limpio. Como le sucedió con Lance Stroll (Aston Martin) en el Gran Premio de Azerbaiyán en Bakú 2017, pudo adelantar a Esteban sobre la línea de meta en el final de la carrera, logrando así entrar al podio y sumar 15 puntos para Mercedes.
Considerando el abandono de Pérez, el equipo alemán ha sacado una ventaja de 28 unidades sobre Red Bull, a una fecha de finalizar el campeonato, por lo que disfrutan ahora de una buena posición. Sin embargo, el Gran Premio de Arabia Saudita ha demostrado que cualquier cosa puede pasar. A abrocharse el cinturón para el cierre de la temporada.