Los pilotos admitieron su confusión con las tres banderas rojas que se dispararon durante el Gran Premio de Australia, y Max Verstappen se quejó del “desorden” causado por las decisiones de dirección de carrera.

 

 

Las banderas rojas que se apoderaron del GP de Australia convirtieron la carrera de Melbourne en un récord en la materia, con tres paros que cambiaron por completo el rumbo de la disputa. A pesar de la imprevisibilidad en el tramo final, las intervenciones no agradaron a los pilotos, y el bicampeón -y ganador de la carrera- Max Verstappen trajo el coro de quejas en torno a la dirección de la carrera. Para el holandés, no había necesidad de parar la carrera tras la caída de Kevin Magnussen .

 

“Estoy muy feliz por la carrera, por supuesto, pero creo que hacia el final, las decisiones lo estropearon todo”, admitió Verstappen. “No creo que necesitáramos esa segunda bandera roja, creo que podría haberse hecho con un coche de seguridad virtual, o en el peor de los casos, un coche de seguridad”, explicó.

 

“Hablemos de esto, creo que tiene a muchos conductores confundidos sobre la necesidad de una bandera roja”, señaló. “Esto lo abordaremos en Bakú ”, subrayó.

 

 

 

 

Pese a asegurar que habrá una conversación con la FIA , Verstappen volvió a defender que no hubo necesidad de parar cuando el piloto de Haas se encontró con la barrera de protección, ya en el 56 de las 58 vueltas previstas en la disputa australiana. Para él, esa fue la razón principal de tantos accidentes al final, ya que la pista y los neumáticos estaban completamente fríos en el reinicio.

 

“Simplemente no entiendo por qué necesitamos una bandera roja”, admitió. “Creo que si tuviéramos un coche de seguridad y un comienzo en movimiento, no habríamos tenido tantos choques. Y tendríamos un final normal. Entonces, ellos mismos crearon los problemas”, señaló.

 

 

Fernando Alonso , tercero al término de la disputa, también se mostró descontento por el número de paradas. Sin embargo, un poco menos incisivo que Verstappen, el español dijo que los pilotos tratan de confiar en la FIA cuando la entidad toma decisiones enfocadas en la seguridad de los competidores.

 

“Me sorprendieron tantas banderas rojas, para ser honesto”, dijo Alonso. “La primera fue por culpa de un Williams en la curva 6, pero allí dimos una vuelta detrás del coche de seguridad y había un poco de gravilla en la pista, pero nada tan complicado”, admitió.

 

“Pero nunca sabemos si el auto mismo iba a la pista. Entonces, aparentemente, una barrera no se estableció correctamente”, dijo. “Creo que la FIA tiene más información que nosotros. Entonces, si hubo una bandera roja, debe haber sido por eso”, subrayó.

 

 

Alonso, por su parte, también intervino en el incidente de Magnussen y se hizo eco de la opinión del holandés: no había necesidad de parar la carrera con bandera roja. Pese a ello, el asturiano repitió una vez más que aún necesita hablar con la FIA para entender el porqué de las decisiones.

 

“Probablemente, preguntaremos en Bakú las razones de la segunda [bandera roja]”, garantizó. “Sé que había restos de neumáticos en la recta. Pero el coche en sí estaba en el interior en la curva 4, por lo que parecía seguro detrás del coche de seguridad. Para nosotros quizás haya una diferencia de opinión, pero como decía, la FIA es la única que tiene todas las cartas sobre la mesa. En ese tipo de situación, confiamos en ellos y tratamos de salir adelante”, dijo.

 

Finalmente, George Russell , quien también es presidente de la Asociación de Pilotos, fue muy crítico con las decisiones de la dirección de carrera, en particular con la desencadenada por el accidente de Alexander Albon . En opinión del británico, la cantidad de grava en la pista no justificaba la necesidad de parar la carrera. Además, hubo un aguijón a la FIA por parte del piloto de Mercedes .

 

“Creo que la bandera roja fue totalmente innecesaria”, dijo Russell. “Obviamente teníamos mucha grava en la línea de carrera. Pero hemos visto cosas mucho peores en el pasado. Me recordó la decisión de la semana pasada en Arabia Saudita, cuando se llamó al coche de seguridad cuando el coche [de Lance Stroll ] estaba completamente fuera de la pista”, recordó.

 

“Realmente no sé qué está pasando con algunas decisiones en este momento”, se quejó. Todos estamos tratando de trabajar junto con la FIA para mejorar las cosas, pero parece un poco desafiante”.