Los de Hinwil aspiraban a mejores posiciones de largada, sin embargo, tendrán que remar duro para poder puntuar.
Mónaco, uno de los trazados más difíciles y tradicionales de la Fórmula 1, ha sido testigo de un día negro para la escuadra Alfa Romeo durante la clasificación del Gran Premio homónimo, séptima competencia del calendario 2023. Con muchas expectativas y la esperanza de obtener una buena performance en este desafiante circuito callejero, el binomio del ‘team’ italiano no rindió como se esperaba y se vio retrasado a lugares de retaguardia de cara a la carrera de este domingo (28).
El décimo puesto de Valtteri Bottas en la práctica matinal sabatina (FP3) hizo ilusionar a la escudería comandada por Alunni Bravi, pues, se esperaba que ambos monoplazas lograran sortear Q1 y Q2 y así poder ubicarse en el decenio final que define los puestos de vanguardia de la grilla de partida, Sin embargo, sorpresivos problemas de adherencia sumados a las complicaciones del tráfico propias de este circuito hicieron esfumar todas las esperanzas del equipo.
El piloto chino Guanyu Zhou, decimosexto en la FP3, apenas pudo marcar un discreto tiempo de 1’13’’523 para la vuelta ubicándose en 19no lugar de largada. Finalizada la ‘qualy’ no ocultó su pesar por el magro resultado obtenido en el principado y ante los micrófonos expresó con resignación:
“Nuestro desempeño en la FP3 me hizo confiar en un lugar en la Q2, y creía que con una pequeña mejora podríamos incluso llegar a la Q3. Sin embargo, resultó ser una tarde complicada: las buenas sensaciones que tenía en la primera vuelta de la Q1 se desvanecieron y, a medida que la pista mejoraba, no pude encontrar ningún agarre extra. Me estaba deslizando demasiado y, aunque mejoré en mi última tanda, eso no fue suficiente en un campo tan competitivo. Partir desde atrás hará que nuestro trabajo sea muy difícil mañana, pero se lo debemos al trabajo de todos en el equipo y a nuestra afición, salir y darlo todo en la carrera”.
Por el lado del mencionado Bottas, el ánimo no era muy distinto. El ex compañero de equipo de Lewis Hamilton en Mercedes pudo clasificarse a la Q2, no obstante, volvió a penar con el tráfico en su intento de mejor giro clavando el cronómetro en 1’12‘’625 y así posicionarse en un frustrante cajón de partida número 15. Terminada la clasificación, el finès comentó:
“Parecíamos capaces de entrar en la Q3, y con una vuelta limpia podríamos haber estado entre los diez primeros, pero encontré tráfico en el sector final en mi última carrera y eso nos costó muy caro. Probablemente perdí un par de décimas, y esto fue suficiente para noquearnos y colocarnos en el puesto 15; con estos márgenes tan ajustados, no podemos permitirnos perder tanto. Adelantar no será fácil mañana, y puede ser un largo día atrás, pero haremos nuestro mejor esfuerzo. También podemos sacar algunos aspectos positivos: lo hicimos mejor este fin de semana, hasta la calificación; el auto se siente mejorado, por lo que esperamos poder construir sobre esto para el futuro”.