Verstappen logró su primera pole en el Principado en un final reñido con Alonso. “Sabíamos que iba a ser un poco difícil”, admitió a la televisión.

 

Max Verstappen se quedó con la pole position en Mónaco. El líder del campeonato no lo tuvo fácil al ser retado por Fernando Alonso a un apasionante duelo de cronómetros que se definió en el último stint que permitió la Q3.

 

“Sabíamos que esto iba a ser un poco difícil para nosotros este fin de semana para poner todo junto. Ayer no fue el mejor comienzo, pero creo que seguimos mejorando y continuaremos mejorando”, dijo el holandés en el parque cerrado.

 

El actual monarca se mostró feliz por el desenlace en la batalla que se libró en las calles de Monte Carlo. Posiblemente haya sido la pelea más dura que tuvo desde su ascenso a la Fórmula Uno.

 

“En la clasificación, tenés que darlo todo y arriesgarlo todo”, sostuvo. Explicó que en la última vuelta no hizo buenos parciales en los primeros dos sectores. Admitió que giró con mucha cautela en Sainte Devote y apostó, a todo o nada, en donde mejor rendía: la última zona que abarca desde Tabac hasta la línea de meta -pasando por la Piscina y La Rascasse-. “En el último sector di todo lo que tenía y corté algunas barreras… Pero por supuesto, muy feliz de estar en la pole aquí por primera vez”.

 

 

Verstappen admite que tiene libre el camino a la victoria. Pero Mónaco impone un primer obstáculo que es la partida desde la parrilla hasta Sainte Devote. “Necesitamos un comienzo limpio”, dice como si fuera una súplica. “Es una carrera corta hasta la primera curva. En Mónaco pueden pasar muchas cosas: Safety Car, lluvia, lo que sea, siempre hay un poco de caos involucrado”.

 

La referencia a las dificultades que presenta la primera curva no es una apreciación temerosa. Lo primero que viene a la mente de los aficionados, aquellos que siguen la Fórmula Uno casi como una religión, es el vuelo del Tyrrell de Derek Daly en 1980. Es la eterna imagen que abre todos los documentales sobre el circuito callejero más famoso del mundo.

 

Una vez sorteado el primer pase por Sainte Devote y bien despegado de Alonso, podrá tener una carrera tranquila. “El coche es rápido, así que ese no es el problema”, confía Verstappen.