Horner se refirió por primera vez al polémico despido de Nyck De Vries de AlphaTauri. Sostuvo que los test de Ricciardo en Silverstone precipitaron el cambio en Faenza.
El director de Red Bull Racing, Christian Horner, aseguró que la continuidad de Nyck De Vries en AlphaTauri se había convertido en una situcaicón “difícil” para el piloto. Además, sostuvo que el despido del holandés se precipitó “más rápido de lo esperado”.
El británico habló por primera vez del polémico relevo en Faenza donde De Vries fue sustituido por Daniel Ricciardo -inactivo desde su salida de McLaren y que regresó a Red Bull como tester y relevo de Milton Keynes-.
“Se estaba convirtiendo en una situación difícil para Nyck de Vries. Pero había muchas expectativas puestas en él porque, aunque no tiene experiencia en Fórmula 1, obviamente es un piloto con mucha experiencia”, comentó a F1 Nation -uno de los poadcast oficiales de Fórmula Uno-.
Explicó que había una sensación general que el ex campeón de Fórmula E y antiguo relevo de Mercedes no estaba “dando en el blanco”. “La pregunta fue, ya sabés, ¿cuáles son las opciones si tuviéramos que cambiar las cosas?”, dijo.
Horner admitió que rápidamente se posaron las miradas sobre Ricciardo y los test de Pirelli que se realizarían en Silverstone tres días después de la carrera. “La opción más interesante para mí fue ver cómo se desempeña Daniel. Así que esa fue la decisión que se tomó. Todo sucedió bastante rápido y aquí está para el Gran Premio de Hungría”. Cabe señalar que el australiano subía por primera vez al RB19 e hizo sus primeros kilómetros con un F1 desde la última fecha del campeonato pasado en Abu Dhabi.
Comentó que el rendimiento de Ricciardo precipitó el final: “Todo sucedió un poco más rápido de lo esperado, teniendo en cuenta que no habíamos completado la prueba”.
Sostuvo que Helmut Marko fue el que comunicó a De Vries su cese en el equipo. “Helmut habló con Nyck. Él fue quien obviamente lo reclutó. Él fue el que habló con Nyck”, dijo.
El Team Manager de Red Bull aseguró que se barajó la continuidad hasta Zandvoort, la primera carrera después del receso estival, para que pudiera correr su Gran Premio de casa. “Creo que es muy difícil. Obviamente, eso habría significado dejarlo en el auto hasta después de las vacaciones de verano”, reveló Horner y añadió: “Creo que la situación estaba clara. Era una cuestión de, bueno, ¿cuál es el punto de esperar?”.