Señaló que se buscaba ayudar a Williams para que actualice su infraestructura. Dijo que algunos “grandes equipos” se opusieron.
El Director ejecutivo de Mercedes AMG, Toto Wolff, criticó la negativa de los equipos a una flexibilización en los topes presupuestarios. Señaló que la iniciativa de aumentar los capex -gastos de capital- era para ayudar a Williams que necesita urgente actualizar su estructura.
Sostuvo que ese fue “el punto de partida” del planteo que encontró una fuerte resistencia en la reunión de la Comisión de F1 realizada la última semana.
“La razón por la que surgió la discusión de capex es que un equipo, Williams, dijo que su infraestructura es deficiente y que no podrían ponerse al día con cosas triviales como equipos de máquinas y cosas técnicas como simuladores”, explicó Wolff a la revista británica Autosport.
Williams es un caso muy especial. James Vowles, jefe del equipo, reveló hace pocas semanas que Grove está muy atrasado en infraestructura. De hecho, sostuvo que la fábrica se desenvolvía con métodos de trabajo vetustos y tecnología con 30 años de antigüedad -lo que explicaría la brutal caída del equipo en las últimas dos décadas-.
Wolff señaló que hubo escuderías que quisieron aprovecharse de esa situación y otros, directamente, se negaron a dar el visto bueno anteponiendo sus propios intereses.
“Algunos equipos se subieron a ese carro para decir, pero en realidad, nos gustaría tener un poco más de gasto de capital. Y ese número subió de $ 50 millones a $ 60 millones, $ 70 millones, $ 90 millones, y de repente, fue como un reinado libre y ¿por qué no cambiamos los niveles de Capex? Pero no hay razón para hacer eso. Creo que hay un equipo que debemos tratar de manera diferente a todos los demás”, dijo.
El jefe de Mercedes comentó que se propuso armar una lista con las necesidades de Williams. Sin embargo, según Wolff, algunos de los “grandes equipos” se opusieron: “Si Williams obtiene cosas, queremos tener cosas”. La posición intransigente cerró las puertas para un aumento de gastos.
“Necesitamos estabilidad en las regulaciones, en las relaciones financieras. Y debe poder tener un plan de negocios que sea válido y no una rienda suelta cada dos años donde cambiamos los postes de meta en capex”, puntualizó Wolff y agregó que esto dio por tierra “la discusión sobre el gasto de capital, pero tal vez encontremos una solución para Williams”.