Sostiene que los tiempos cambiaron y los equipos están dejando de lado el método de mano dura. “No hay recetas ganadoras, solo tienes que mejorar el sistema”, señaló.
A Enzo Ferrari, Mauro Forghieri, Luca Cordero Di Montezemolo y Jean Todt los unió una cualidad: dirigir los destinos de la Scuderia con mano firme. En distintas épocas, sea desde Maranello o en el box, impusieron a rajatabla orden y disciplina para que el equipo alcance la cima.
Si bien no desdeña de esa metodología, Frédéric Vasseur tiene una mirada distinta. El director general de Ferrari entiende que la mano dura ya no encuadra en el deporte del Siglo XXI. “El puño de hierro no es mi estilo y los tiempos han cambiado. El enfoque psicológico de las personas es diferente, necesitamos un enfoque más inclusivo que haga que todos participen de un proyecto ganador”.
Consultado por la revista Autosprint si la mano de hierro que se aplicó en los tiempos de Michael Schumacher y Todt es el enfoque correcto para que el cavallino vuelva a la victoria, Vasseur señaló que había que comprender el contexto.
“De 1993 a 2000, Ferrari no ganó. No hay recetas ganadoras por definición. Solo tenés que mejorar el sistema y Jean [Todt] fue excelente para sobrevivir y desarrollarlo correctamente. ¡Creo que a Jean le costó más sobrevivir siete años que ganar títulos una y otra vez!”, explicó.
Balance de mitad de temporada
El francés repasó lo que dejó el Gran Premio de Bélgica. Un breve análisis sobre dónde se encuentra Maranello después de un comienzo complicado con el SF-23. Remarcó que el tercer puesto de Charles Leclerc hay que tomarlo con calma “sin emocionarnos hoy ni deprimirnos cuando las cosas no van tan bien”.
Reveló que, puertas adentro, después del Gran Premio de Hungría, hubo preocupación porque McLaren ratificó el salto de calidad con el que sorprendió en Silverstone.
“En la reunión posterior a la carrera en Budapest, a muchos les pareció que era el fin del mundo, que McLaren volaba y que no sabíamos hacer nuestro trabajo. Siete días después, todo cambió. McLaren tuvo problemas en la carrera y estamos por delante. Necesitamos mantener la calma y enfrentar nuestro trabajo, carrera tras carrera, con el espíritu adecuado, trabajando en nuestros límites”, dijo.
Sostuvo que la temporada está muy reñida -en alusión a los equipos que están por detrás de los inalcanzables Red Bull– y siempre está latente la posibilidad de “perder dos décimas que te hacen pasar del segundo al undécimo puesto”. “No estamos al final de la temporada, todavía queda mucho por hacer, pero estoy contento de afrontar el parón veraniego después de la buena carrera en Spa-Francorchamps”, comentó Vasseur con optimismo.