Cayó el circuito cerrado de TV que monitorea el trazado de Montreal y FIA no autorizó la actividaden pista. Previamente hubo una bandera roja para retirar el coche de Gasly que se detuvo por problemas mecánicos.
La primera práctica del Gran Premio de Canadá tuvo que ser cancelada por la caída del Circuito Cerrado de TV (CCTV) que monitorea el trazado Gilles Villenueve. Este sistema es una pieza clave de seguridad y Dirección de Carrera no autorizó el reinicio de la actividad por la bandera roja que ocasionó Pierre Gasly a los dos minutos de iniciada la tanda.
Max Verstappen, el líder del campeonato, fue el primero en salir a pista. De a poco se fueron sumando varios coches para la vuelta de reconocimiento. Sin embargo, apenas comenzada la sesión, el francés reportó que su Alpline tenía fallas.
“Perdí el eje de transmisión”, alertó por radio después de girar en la curva siete. Los intentos de mantener en el coche en marcha, que se detenía lentamente, resultaron en vano. “Dejame saber que hacer”, rogaba a su ingeniero.
Durante tres minutos, Gasly trató de hacer arrancar el coche sin éxito. Finalmente salió la bandera roja y los comisarios pudieron ingresar a pista para retirar el auto hacia la vía de escape ubicada debajo del puente que conecta a la isla. Hubo un último intento del piloto por recuperar el Alpine pero fue inútil.
Con el coche fuera de pista empezó a llamar la atención la demora del reinicio de la actividad. Después de diez minutos de incertidumbre, la FIA comunicó oficialmente los problema con el CCTV.
El reloj seguía corriendo y era evidente que no sería una falla de rápida solución. Cuando restaban diez minutos para el final de la PL1, se anunció la cancelación de la tanda.
¿Puede recuperarse la práctica? Según algunos trascendidos del paddock, aunque no se expidió Dirección de Carrera, podría extenderse la PL2 si hay acuerdo unánime entre los equipos. Pero hay un pequeño problema: la lluvia.
Los últimos reportes indican que son altas las probabilidades de precipitaciones sobre Montreal. De haber inclemencias climáticas nadie arriesgaría y se cumpliría con el tiempo reglamentario de 60 minutos.