Roland Ratzenberger, llegó a la Fórmula 1 gracias al talento y esfuerzo personal, su muerte en cierta medida “Opacada” por la del gran Ayrton merece un capítulo en forma de dedicatoria en esta página.
Salzburgo, 4 de julio de 1960, en un hogar donde la comida no faltaba pero tampoco sobraba, dio sus primeros pasos Roland Ratzenberger, aquel jovencito que contando 15 años, se emocionó frente a su televisor al ver a su compatriota Niki Lauda consagrarse campeón mundial de Fórmula 1, esa tarde, en una confesión que solo se hace de “Hombre a Hombre”, Roland le aseguro a su padre que cuando sea grande competiría Fórmula 1, y que se quede tranquilo , ya que “llegaría a ser alguien”.
Su padre no le prestó atención , pero con el tiempo, accedió a las suplicas de su hijo para su primer Kart, con los años tardíos, pero la pasión intacta, Ratzenberger, consiguió competir en la Fórmula Ford Alemana, donde consiguió valiosos triunfos, con ese modesto auto, se inscribió en el Festival de Fórmula Ford de Brands Hatch , festival que solo es ganado por verdaderos talentos, como Ayrton Senna, Jhonny Herbert entre otros, Roland conquistó la segunda colocación en la primera competencia, y ganó la segunda, obteniendo proyección internacional, su carrera tuvo idas y vueltas, lo poco que conseguía en una temporada , lo ahorraba para su gran sueño, hasta que llego la temporada 1994.
El Simtek-Ford de Nick Wirth fue fabricado deprisa, era lento y adolecía de sobrepeso y otras carencias, como una aerodinámica poco desarrollada y motores Ford de poca potencia. Sin embargo, en manos de David Brabham y las del propio Roland, quizás arriesgando más de lo debido, lograban sacarle algunas décimas extras que mejoraban los pobres resultados a los que el monoplaza les destinaba, en dura pugna con los colistas Pacific.
El sábado, Senna conquistó la Pole Positions, faltando veinte minutos para finalizar las tandas clasificadoras, Roland Ratzenberger, le comenta a su ingeniero de pista Nick Wirth: “Mierda, tengo que controlarme un poco, estoy peleando con el auto como nadie, no le puedo encontrar el limite”.
Cuentan que el Austriaco hizo un giro de reconocimiento calentado gomas, paso por la meta principal zigzagueando, y el rugido del Ford HB hizo que los presentes se tapen los oídos, se dice que Roland no pudo negociar la curva variante alta yéndose fuera de pista, esto quizás fue lo que resintió el soporte del alerón delantero de su Simtek, pero el Austriaco “guapeo” el auto subiéndolo a la pista, volanteo varias veces para limpiar sus cubiertas, y acelero sin piedad buscando su tiempo de clasificación, una bloqueada antes de Tamburello, a 315KM/H en el curvón que se tomaba como una recta, y en el momento de entrar a la variante Villeneuve, el alerón delantero de su auto se desprendió, el impacto fue terrible, Roland falleció en el acto por rotura de la base de cráneo, las imágenes televisivas causaban estupor, Senna con los ojos bañado en lágrimas al ver el accidente dijo: “Oh mierda, Dios… ¿A cuánto fue?, a 320? Parece que se le rompió algo, por como siguió de largo.”
Los presentes albergaban un poco de esperanza, hasta que un comunicado giraba en torno al circuito Enzo y Dino Ferrari. Dicho comunicado decía:
“Damas y caballeros, los organizadores del Gran Premio de San Marino, han recibido el informe del hospital Maggiore de Bologna, de que el piloto del auto numero 32, Roland Ratzenberger ha fallecido debido a las lesiones ocasionadas por el accidente, que sufrió en la prueba clasificatoria de Imola, este sábado 30 de abril.”
¿Quien era Ratzenberger? el diccionario de Alfredo Parga lo presenta así:
“Roland Ratzenberger había nacido el 4 de julio de 1962 en Salzburgo (Austria), ingeniero mecánico de profesión, corría obsesionado por la falta de dinero, había conseguido entrar a la Fórmula 1 hipotecando hasta su última esperanza, empezaba a competir en la Fórmula Ford 1600 en 1983 y sabía lo que hacía, iba a ser campeón Alemán, Austriaco y Europeo en 1985, y ganaba el festival Ford de Brands Hatch en 1986, en Japón corría turismo grupo C y Fórmula 3000 desde 1989, alcanzando el campeonato en 1990 y 1992, en 1993 disputaría las 24 horas de Le Mans, iba a ser quinto en la general y ganador en su categoría …era alguien, cuando entregaba lo poco que había podido juntar para correr un tuberculoso Simtek, le aclaraban sin remilgos …alcanza para cinco carreras, después…….. después si no había más Roland sabía que todo habría terminado para él, que tendría que meter sus sueños en una valija y volverse a su Austria natal, no conseguía clasificarse en Brasil, el Simtek…..en el Gran Premio del pacifico (Aida Japón) terminaría 11 a cinco vueltas del ganador después de largar ultimo entre los 26 pilotos, que iniciaban la carrera. Imola. representaría su tercera oportunidad, cuando solo quedaba dinero para correr Mónaco y España, cuando su ataúd estaba en camino de Austria, en el equipo se lo reemplazaba antes que su padre acercara entre sus manos torpes, un ramo de flores al lugar donde Roland Ratzenberger había muerto, ya no era nada, en Salzburgo, aseguran que con él, murió el ultimo caballero.”