El jefe de Red Bull cree que los de Brackley pueden mejorar solo si Toto Wolff estimula adecuadamente a sus empleados.
Red Bull disfruta de las mieles del éxito. En efecto, la temporada 2023 de Fórmula 1 ha emergido como una de las más brillantes qué se recuerde para la escudería con sede en Milton Keynes, desafiando con creces las expectativas previas que se han cimentado en una destacadísima labor de parte de su dupla de talentosos pilotos, estrategias certeras diseñadas por un grupo de ingenieros envidiados por los demás equipos y el desarrollo de un monoplaza prácticamente imbatible en pista.
En contrapartida, Mercedes ha tenido un año discreto. Si bien han podido alzarse con el subcameponato venciendo a Ferrari en la Copa de Constructores por sólo tres unidades, los comandados por Toto Wolff saben que con eso no alcanza, pues, no han logrado ganar ninguna carrera este año limitándose a pelear por un segundo puesto que, en verdad y a la luz de sus objetivos, tiene gusto a poco.
Christian Horner, director de la escuadra de la bebida energética desde 2005, ha analizado la situación qué atraviesan sus archirrivales alemanes, un equipo acostumbrado a ganar durante casi una década tanto en el Mundial de Pilotos como en el mencionado trofeo que premia a las escuderías, sorprendiendo con una teoría que pone en cuestión el trabajo de Wolff al frente del ´team´de las flechas de plata:
“Está ante un gran desafío, llegó al deporte con un equipo ganador y ha tenido un gran período de éxito durante siete u ocho años. De repente, es un gran cambio cuando ya no puedes ganar Grandes Premios, creo que Mercedes sólo ha ganado una carrera en las últimas dos temporadas”, declara en el podcast Sky Sports F1.
Horner, quien ya ha protagonizado múltiples polémicas con Wolff, principalmente tras la recordada consagración del neerlandés Max Verstappen en 2021, considera al factor anímico del plantel de trabajadores del equipo como un componente fundamental a la hora de encontrar el éxito. En este sentido, el británico, que en noviembre último cumplió 50 años de edad, agregó:
“No motivarlos perjudica a la gente que empieza a hacerse preguntas dentro de la organización. Como líder tienes que motivar a tu gente y levantarla desde cero. Eso presenta un desafío completamente diferente, pasas de estar en la cima del campo a luchar para volver a ese lugar. Se trata de hacer que la gente crea en sí misma y crea confianza en uno mismo, no puedes evitar que te culpen con el dedo si de repente dejas de ganar, entonces el equipo se pone realmente a prueba”.