Además, el alemán aclaró que la continuidad dentro de la F1 siempre está atada al rendimiento en pista.
El regreso de Nico Hülkenberg a la F1, esta vez como piloto del equipo estadounidense Haas, reemplazando a Mick Schumacher y formando dupla titular junto al danés Kevin Magnussen, seguramente aportará la experiencia necesaria a los de Carolina del Norte para poder continuar por el camino de la recuperación evidenciada el último año, luego de sendas temporadas (2020 y 2021) con resultados para el olvido.
Cabe recordar, que la llegada de Magnussen a la escuadra comandada por el italiano Guenther Steiner se dio casi de apuro luego que diversas federaciones deportivas prohibieran participar a los atletas rusos en distintas competencias internacionales no siendo la F1 la excepción, tras la invasión ordenada por Vladimir Putin a su vecina Ucrania. Esto hizo que Nikita Mazepin deba ceder su lugar no sin controversiales contrapuntos que han incluido denuncias de parte de éste último contra Gene Haas, propietario del equipo, por haber adelantado dinero para desarrollo del VF23 que luego no fue devuelto.
En lo que respecta estrictamente al arribo de Hulkenberg, se puede decir que aparecen varios interrogantes, por ejemplo: cómo será su futura relación con Magnussen, pues, es de público conocimiento que, en el pasado cercano, ambos corredores han protagonizado picantes cruces en pista y fuera de ella teniendo su punto culminante en el intercambio de insultos en vivo y ante las cámaras de la transmisión internacional de TV una vez finalizado el Gran Premio de Hungría de 2017. Sumado a esto, en los últimos días se ha comentado que otro aparente frente de conflicto para el teutón es el deterioro de su relación con Mick, hijo del siete veces campeón Michael Schumacher, quien no habría visto con buenos ojos que ‘Hulk’ tome su lugar en Haas. Consultado acerca de esta situación por la cadena RTL, Nico fue claro:
“Mick y yo no hemos hablado entre nosotros desde el anuncio de Haas, aunque nunca habíamos intercambiado algunas ideas. Es un piloto de una generación diferente y no hemos tenido una relación real como la que tiene con Sebastian, por ejemplo. La historia es la que es, si yo no hubiese reemplazado a Mick, lo habría hecho otro piloto. En la Fórmula 1 todo se trata de la performance, si convences y rindes, vas a tener un trabajo y tendrás ofertas, si el rendimiento no está ahí, todo se acaba muy rápido”.
En otro orden, el oriundo de Emmerich am Rhein, ex piloto de los equipos de F1 Williams, Force India, Sauber y Renault y ganador de la edición 2015 de las 24 horas de Le Mans, comentó cómo se prepara y cómo vive este regreso a ‘la máxima’:
“Se siente bien estar de vuelta, ya he empezado a entrenar con la intensidad de antes. Los últimos años han sido mucho más relajados. Si no pilotas un Fórmula 1 en meses, las fuerzas G, que tienen un gran efecto en tu cuerpo, se sienten como algo especial. Puedes entrenar como un campeón del mundo, pero sufrirás, tienes que mantenerte realista y saber que dependes del coche”, concluyó.