La pole de Pérez y la eliminación de Hamilton en segundo plano por el accidente de Schumacher

La pole de Pérez y la eliminación de Hamilton en segundo plano por el accidente de Schumacher

Pérez dio el batacazo y desplazó a las Ferrari. Hamilton, sopresivamente, quedó eliminado en Q1. La jornada se ensombreció con el fuerte accidente de Schumacher.

 

Conmoción, preocupación y alivio. Tres sensaciones que estuvieron divididas, entre una y otra, por un tiempo que duró una eternidad. El accidente de Mick Schumacher en Q2 hizo contener el aliento a propios y extraños. Y nuevamente surgieron los cuestionamientos sobre la seguridad del circuito callejero de Jeddah.

 

Tan impactante fue el accidente del alemán, entre la curva 10 y 12, que opacó los titulares del caótico sábado en Arabia Saudita: Sergio Pérez le quitó la pole a las Ferrari y, el más impactante, Lewis Hamilton no pudo superar la Q1.

 

El británico y la F1 no salen de su asombro. El Mercedes W13 del siete veces campeón se retrasó en los tiempos mientras su compañero de equipo, George Russell, lograba colar su coche en Q2 con el quinto mejor registro. En la P3 se observó una mejora en el auto de Hamilton, el equipo logró reducir el porpoising con la rebaja del piso. Sin embrago, la solución hizo unas décimas más lento el monoplaza.

 

Pérez al bajarse del auto, le ahogó el día a Ferrari. (Oracle Red Bull Racing)
Pérez al bajarse del auto, le ahogó el día a Ferrari. (Oracle Red Bull Racing)

 

A falta de dos minutos para finalizar la primera tanda, Hamilton se encontraba en zona de eliminación. Con enorme esfuerzo logró bajar su registro para ubicarse en la última plaza de Q2. Pero Lance Stroll (Aston Martin) le quitó la posición y eliminó al británico.

 

La segunda parte de la Qualy  marcó un antes y después en Jeddah. Dejó en un segundo plano lo sucedido con Hamilton y lo que ocurriría en Q3. Schumacher, con vuelta abierta, perdió el control de su Haas al pasar por arriba del piano de la variante 10. La perdida de adherencia y la falta de estabilidad por el contacto hizo el resto. Dio un semitrompo a más de 230 km/h, golpeó el muro con su lateral derecho y el auto -totalmente destruido- se deslizó por inercia hasta la salida de la curva 12.

 

Inmediatamente se neutralizó la clasificación. La falta de imágenes alimentó la desesperación de los aficionados que rogaban por el bienestar de Mick. La aparición de una ambulancia en pista tampoco ayudó a mantener la calma. Fueron momentos de tensa preocupación. Los peores presagios comenzaban a circular en el paddock.

 

Después de varios minutos de incertidumbre se conocía, de manera extraoficial, que Schumacher estaba conciente y se aplicarían los protocolos de emergencia para un accidente de tal magnitud. Finalmente, y para alivio del mundo, se pudo ver al alemán -en camilla y hablando con sus asistentes- cuando se disponían a trasladarlo en helicóptero al Hospital de la Fuerzas Armadas Rey Fahd -a pocos kilómetros del circuito-.

 

El Haas de Schumacher quedó destruido. (Imagen TV: DAZN / F1TV)
El Haas de Schumacher quedó destruido. (Imagen TV: DAZN / F1TV)

 

A partir de ese momento, lo que pudiera ocurrir en pista era solo una anécdota. Checo le quitó el primer lugar a las Ferrari. Unos segundos antes, Charles Leclerc y Carlos Sainz estaban mano a mano disputándose el primer lugar de la parrilla. La hazaña del mexicano fue agridulce para Red Bull. A Max Verstappen, que venía peleando hasta la Q2 con los de Maranello, los neumáticos blandos le jugaron una mala pasada y clasificó cuarto.

 

También quedó en un segundo plano el quinto puesto de Alpine con Esteban Ocon y el enorme esfuerzo de Russell por alcanzar la sexta posición con el maltrecho W13. Además, el británico, hizo el milagro de llevar un coche con motor Mercedes al Top Diez.

 

Fernando Alonso (Alpine) , Valtteri Bottas (Alfa Romeo), Pierre Gasly (AlphaTauri) y Kevin Magnussen (Haas) se repartieron -en ese orden- el resto del primer lote de la grilla.

 

Leclerc fue poleman unos segundos hasta el batacazo de Checo. (Scuderia Ferrari)
Leclerc fue poleman unos segundos hasta el batacazo de Checo. (Scuderia Ferrari)

 

Todas las sorpresas que deparó la Qualy quedaron marginadas por el accidente de Schumacher. Una vez más quedó demostrado la peligrosidad de las altas velocidades en el trazado callejero de Jeddah. Las mínimas medidas adoptadas por los organizadores y supervisadas por la FIA fueron insuficientes. En los últimos cuatro meses, con un Gran Premio disputado y otro en desarrollo, quedó demostrado que el circuito no es apto para una carrera de Fórmula Uno.

 

Se produjeron serios accidentes en la prueba de F2 desarrollada este sabado. En la Qualy, Nicholas Latifi (Willimas) y Mick Schumacher sintieron el rigor de Jeddah. La soberbia de los promotores y la terquedad de los dirigentes y la gerencia están exponiendo a los pilotos. Y aun resta la carrera.