El finlandés dedicó toda la jornada 3 a realizar simulacros de carrera y logró bajar el tiempo de vuelta marcado por Checo Pérez en la mañana. Los del trébol cierran de manera positiva las pruebas de pre-temporada en Bahrein.
Fiel a su estilo, Kimi Raikkonen, dio la nota en un fin de semana de Fórmula Uno. Sea por los puntos o una jornada de pruebas, el finlandés exprimió el auto para conocer todas las bondades que podría darle el Alfa Romeo C41 durante la temporada. ¿El premio?… tener la vuelta más rápida durante más de una hora.
Los de Hinwil aprovecharon la última jornada para dar rienda suelta a Kimi. El campeón 2007 acumuló kilómetros y kilómetros en pista sin que ningún inconveniente alarmara al box. El resto de los equipos eran un movimiento constante de hombres y máquinas; en Alfa Romeo solo era ver como el finlandés giraba con tranquilidad como si nada pasara.
Fue un doble simulacro de carrera: 91 vueltas por la mañana y 74 por la tarde. En total 165 giros acumulados en el Bahrein International Circuit. Mientras los aficionados y los comentaristas de TV se entretenían con las desventuras de Lewis Hamilton con el W12 o tratando de adivinar cuando saldría Max Vertappen; Kimi sorprendió a Sakhir con la vuelta más rápida.
Con un tiempo de 1’29.766, bajaba un segundo la marca que Sergio Pérez (Red Bull) estableció por la mañana. El nuevo record se mantuvo durante más de una hora, cuando el japonés Yuki Tsunoda (Alpha Tauri), también sorprendió bajando el tiempo de Raikkonen con 1’29.053.
Kimi no volvería a bajar el reloj. Continuaría con su misión de seguir acumulando kilómetros y disfrutar de cada vuelta a bordo de un Fórmula Uno. Era lo único que importaba en el campamento del trébol.
Para la escuadra de Hinwil fueron tres días positivos. Tanto para Antonio Giovinazzi como para Raikkonen, el C41 cumplió con las metas programadas. Con la información recolectada solo queda preparar la primera presentación del año. Y seguir disfrutando de Kimi con su manera tan particular de vivir el día a día.