El danés comentó que la escudería mejoró la calidad de trabajo con la nueva sede en Maranello.  “Ahora es un grupo más grande, eso ayuda a la comunicación entre los diferentes departamentos”, sostuvo.

 

Kevin Magnussen estuvo fuera de Haas durante un año. Entre diciembre de 2020 y febrero de 2022, la escudería norteamericana pasó por varios procesos internos; el más importante, la mudanza al Centro Haas ubicado dentro del complejo de Ferrari en Maranello.

 

“Ha sido un buen cambio en el equipo”, comentó el piloto danés al ser consultado sobre las nuevas oficinas que ocupa el equipo desde el año pasado.

 

“El año que estuve fuera se mudaron. Ahora -señala- es un grupo más grande en Maranello, creo que eso ayuda a la comunicación entre los diferentes departamentos. Solo poder ir y hablar entre ellos”.

 

El estrecho vínculo entre Ferrari y Haas estuvo en el centro de la polémica en los últimos meses. Especialmente por ciertas similitudes, según sus detractores, del VF22 con el F1-75 del Cavallino.

 

 

El equipo negó cualquier ayuda externa de su proveedor de motores y la FIA no encontró irregularidades. El vendaval de críticas no opacó la satisfacción de Guenther Steiner y compañía con el Centro Haas. Fue una bocanada de aire fresco que revitalizó a la organización.

 

“Nuestro equipo durante todos esos años ha estado repartido por todo el mundo: en los Estados Unidos, luego en dos lugares en Italia y uno en Inglaterra; muy repartidos. Y creo, que en términos de comunicación, es más fácil cuando puedes ver el escritorio de tu compañero y conversar”, dijo Magnussen.

 

El danés comentó que la sede en Maranello permitió aumentar el personal y mejorar el clima de trabajo. Estos cambios, asegura, también repercutieron en el programa del VF22: “El auto también muestra eso. Así que Haas está en un buen lugar al que apunta”.