El piloto del equipo estadounidense Haas repasó su primer año en la F1 y confía en que la próxima temporada tendrá mejores chances frente a sus rivales.
Nikita Mazepin no ha tenido una buena temporada inicial dentro del gran circo. Su rendimiento personal, sumado al medio mecánico con el que ha contado durante 2021, no han posibilitado observar grandes desempeños de su parte. Los antecedentes previos del piloto moscovita podrían calificarse como aceptables, ya qué venía de ser quinto en el campeonato de la F2, habiendo obtenido dos victorias durante 2020, una en Silverstone y la restante en Mugello y cuatro segundos puestos.
Sabido es, que el team Haas no ofreció a sus pilotos un coche acorde a las pretensiones que cualquier corredor pueda tener, pues, el equipo con sede en Carolina del Norte avisó a fines de 2020 que no harían desarrollos en el monoplaza, preservando presupuesto y recursos para enfocarse en los cambios reglamentarios que regirán la máxima a partir de 2022. No obstante, Mazepin no pone excusas:
“Tuve algunas buenas batallas este año con algunos coches más rápidos y me sentí cómodo. Siento que tengo esa confianza. Recuerdo que en la primera carrera en Bahréin daba mucho miedo porque los coches son muy largos y anchos. Pero ahora estoy más adaptado, así que conducir un coche más equilibrado y más predecible debería hacerlo más fácil y más agradable”, expresó.
Nikita, que en el próximo mes de marzo cumplirá 23 años, prefiere no pensar en el limitado monoplaza con el que tuvo que competir, aunque reconoce que se le ha hecho muy difícil tener como única aspiración ganarle a su compañero de equipo:
“En última instancia, para mí, cuando estoy en una pista de carreras, se trata de pasar por ese propósito de mí mismo y pasar por las carreras y realmente sentir que puedes influir en el resultado. Pero en 2021 tener un buen fin de semana sólo consistía en terminar delante de mi compañero de equipo, en el 19° lugar, es un poco difícil volver a casa realmente satisfecho sólo con eso”, explicó.
Más allá de estos contratiempos, que han incluido encontronazos con rivales, además de varios despistes y enojos con su equipo, el piloto ruso piensa que ha aprendido de los momentos difíciles con los que ha tenido que lidiar durante 2021: “Creo que en general la temporada fue positiva. Hemos dado grandes pasos adelante en mi confianza y en mi comprensión del coche desde el punto en que empezamos. He tenido muy buenas carreras al principio del año, luego algunas difíciles. Así que ya sabes, la vida en la F1 no es consistente para nadie. Pero siempre supimos a lo que íbamos, y 2022 es el año en que pondremos las cosas en orden. Y creo que estoy en un buen lugar para hacer exactamente eso”, concluyó.