El principado comenzó las tareas para armar el tradicional circuito callejero. Al mismo tiempo, la alcaldía, impulsó un plan de repavimentacón de todas las arterias que compone el trazado.*

 

Mónaco ya respira Fórmula Uno. El calendario marca que faltan 65 días para la largada del Gran Premio. Sin embargo, los habitantes del principado comienzan a ver el despliegue de su mayor orgullo: el circuito callejero. También, como es de costumbre, los monegascos están pendientes del cronograma de obras que obligará al traslado de estaciones de bicicletas y paradas de autobuses. Además, este año, se sumará un aditivo que es clave para el buen desarrollo de la carrera: el reasfaltado de las calles que forman el trazado más famoso del mundo.

 

La última semana, el Gobierno del Principado anunció el cronograma para la puesta en escena del más glamoroso de los Grandes Premios. El pasado 7 de marzo comenzaron las tareas para montar las estructuras en la zona portuaria (Nouvelle Chicane, Tabac, Louis Chirion, La Piscina y La Rascasse). La segunda parte de las obras arrancarán el próximo 20 en el distrito Monte-Carlo (Noghès, la recta principal -y calle de boxes-, Saint Devote, Beau Rivage, Massenet, Casino, Mirabeau, Fairmont -o Lowe para los nostálgicos-, Portier y el legendario túnel Louis II.

 

Es habitual que en los primeros días de marzo comience el armado del circuito para las carreras que albergará a lo largo del mes de mayo. Este año, Mónaco, tendrá tres eventos en agenda: Fórmula E (30 de abril de 2022), el Gran Premio Histórico (13 al 15 de mayo de 2022) y la Fórmula Uno (26 al 29 de mayo de 2022).

 

 

A diferencia de años anteriores, la alcaldía adelantó las obras diez días antes con un plan de reasfaltado de las calles donde transitarán los monoplazas. Desde el 28 de febrero las cuadrillas trabajan, entre las 20 horas y las 6 de la mañana, en la repavimentación de todo el circuito. Bajo la supervisión de la Consejalía de Urbanismo, los trabajos se dividieron en etapas: Quai Albert I (se extiende desde Tabac hasta Rascasse); Avenue d’Ostende (entre Saint Devote y Massenet); Boulevard Albert I (recta principal); Avenue des Spélugues (horquilla Fairmont); el túnel Luis II; Boulevard John F. Kennedy (desde  Nouvelle Chicane hasta Tabac); las curvas Rascasse y Noghès. Las autoridades estiman que las trabajos finalizarán el 16 de marzo.

 

“La puesta en marcha del circuito urbano requiere de un cierto número de instalaciones para albergar las tres carreras en el corazón del Principado. También, a finales de febrero, con la campaña anual de asfalto, [comienzan] los trabajos preparatorios necesarios para la instalación de las infraestructuras relativas a la seguridad, las grabaciones de televisión, la publicidad pero también para la recepción y acceso del público”, informó el Gobierno del Principado sobre el armado del circuito.

 

La propia televisión monegasca siguió con entusiasmo las obras de pavimentación. Un equipo de Monaco Info cubrió como se desarrollaban las tareas en Fairmont (considerada la postal más icónica del Gran premio). Si bien, como explicaron las autoridades, hay tareas de reasfaltado todos los años, es la primera vez en mucho tiempo que la alcaldía realiza este trabajo en todo el trazado previo al Gran Premio. Queda la duda si estás obras tienen relación con los neumáticos de 18 pulgadas que estrenan los coches esta temporada.

 

 

Esta edición del Gran Premio de Mónaco traerá una novedad -para disgusto de los aficionados de la vieja guardia-. No habrá más ensayos los jueves y desaparecerá el día libre de los viernes (una tradición monegasca). A partir de este año, la fecha usará el cronograma del resto de las plazas: actividad de viernes a domingo.

 

La modificación es consecuencia del apretado calendario de 22 fechas de la Fórmula Uno. La incorporación de Miami obligó mover a España de su habitual segundo fin de semana de mayo al penúltimo -una semana antes de Monte-Carlo-. La agenda de Mónaco impedía llevar a cabo, en tiempo y forma, la logística desde Barcelona. El organizador de la carrera, el Automobile Club de Monaco (AMC), se resistía a los cambios lo que obligó a Liberty Media a semanas de intensas negociaciones. Finalmente, casi a regañadientes, el AMC aceptó prescindir de sus tradiciones. Había que garantizar la supervivencia de la joya más preciada del principado y de la Máxima Categoría.

 

*Este artículo se realizó en base a información oficial del Gobierno del Principado, La Gazzete de Monaco y Monaco Info.