James Allison será el representante de la escudería alemania en la gala de fin de año, ya que Toto y Lewis, tras los reclamos a la dirección de carrera por el final del GP de Abu Dhabi, brillarán por su ausencia.
Poco se puede decir que no se haya dicho ya sobre la resolución del mundial de F1 en el circuito de Yas Marina. Que Lewis Hamilton (Mercedes) y Max Verstappen (Red Bull) tuvieron uno de los mejores duelos de este siglo, que llegaron empatados a puntos a la carrera final en el campeonato más largo de la historia, que el mundial se definió en la última vuelta y que se cortó la racha del dominio del británico desde 2017, es algo que está en boca de todos estos días. Sin embargo, otro tema ha estado sobre la mesa y le ha robado un poco el protagonismo a lo antes mencionado. Se trata de las protestas del equipo Mercedes sobre cómo se desenvolvió el final de la carrera en los Emiratos Árabes Unidos.
Pese a que Hamilton felicitó al nuevo campeón después de la carrera, Mercedes presentó dos denuncias formales contra la FIA por infracciones al reglamento; una, desestimada rápidamente, era la de que Verstappen habría adelantado a Hamilton bajo coche de seguridad, y la otra, que debería haberse permitido a todos los rezagados desdoblarse, además que habría que esperar una vuelta más para relanzar la carrera después de eso, por lo que la misma hubiera terminado bajo coche de seguridad.
La FIA desestimó el segundo reclamo, alegando que Masi puede tomar la decisión de ordenar únicamente a ciertos rezagados desdoblarse, pero Mercedes apeló. Finalmente, hace unas horas, el equipo alemán retiró la apelación, pero manteniendo sus críticas a la Federación Internacional de Automovilismo, que creó una comisión especial para revisar los sucesos de Abu Dhabi.
Sin embargo, y sin haberse aclarado algún motivo en especial, Toto Wolff, el jefe del equipo alemán, y Lewis Hamilton, no estarán presentes en la tradicional ceremonia de premiación de la FIA, que entrega todo tipo de distinciones a los pilotos y escuderías destacadas de cada año. Es probable que su ausencia sea una forma de protesta, ya que pese a retirar las apelaciones sobre las decisiones de la Federación, permanecen en desacuerdo con lo que sucedió. Además, la marca alemana no ha presentado a sus monoplazas de F1 ni de Formula E, que también ha conquistado ambos títulos de pilotos y constructores de la mano de Nyck de Vries y el ex-Mclaren Stoffel Vandoorne.
Lo primero que dijo Hamilton aún en la carrera, y que ha sido replicado por muchos de sus fans, es que la competencia estaba siendo “manipulada”. Él, junto a su compañero Valtteri Bottas, le dieron el 8° título de constructores a Mercedes, que será recogido por James Allison, el director técnico del equipo.
“No estaré allí por mi lealtad hacia Lewis y mi propia integridad personal. Pero estaremos representados por Allison como un equipo, que tomará el trofeo en nombre de toda la gente en Brackley y Brixworth que debería celebrar nuestro octavo título mundial, que merece ser celebrado, porque es un logro del que estar orgulloso.” dijo Wolff.
Hamilton estaría rompiendo el artículo 6.6 de las regulaciones deportivas de la F1, ya que ésta declara que “Los pilotos que terminen primero, segundo y tercero en el campeonato deben estar presentes en la Ceremonia de Premiación anual de la FIA”. No está claro si se castigará su ausencia o no. Lo que está claro es que la dirección de carrera de la F1, junto con la FIA, tienen un largo trecho por recorrer para remedar ciertos defectos.