El mexicano se impuso en Arabia Saudita y en segundo lugar arribó Verstappen. Alonso finalizó tercero pero fue desplazado al cuarto lugar por una penalizción de diez segundos.

 

Sergio Pérez dominó con total autoridad un Gran Premio de Arabia Saudita que construyó desde el momento que quebró los relojes en la Q3 del sábado. El mexicano no se dejó amedrentar por la voraz remontada de Max Verstappen y tampoco hizo caso a las recomendaciones del pit wall ante la falta de garantías que su compañero siguiera la misma estrategia.

 

Los Red Bull, como en Bahrein, corrieron su campeonato paralelo al mundial. Ratificicaron la superioridad de los RB19; pero, como contracara, quedó expuesta la desconfianza mutua entre ambos pilotos.

 

 

Para llegar a esa instancia, previamente, Checo debió redimirse de la largada. Fernando Alonso tuvo mejores reflejos y le ganó la cuerda por el interno. El español buscó escaparse como podía del RB19, aun sabiendo que era una quimera. Sin embargo, antes de cumplir el primer giro, el español fue sancionado con cinco segundos por haber acomadado mal el coche en el cajón de partida. Si bien no le significó una ventaja deportiva, el reglamento es claro que el coche debe estar dentro del cajón y el Aston Martin estaba levemente fuera de la línea izquierda.

 

Aún con la penalización, el asturiano obligó a Pérez a pelearle la posición. Checo logró rebasarlo con el DRS en la vuelta cuatro. Pero Alonso, con inteligencia, se pegó a la cola para aprovechar el rebufo a su favor y ampliar la ventaja sobre George Russell (Mercedes) que se ubicaba tercero.

 

Con el Red Bull escapándose en la punta y el español usándolo de grúa, las miradas se desviaron hacía el tercer pelotón. Verstappen, que largó decimoquinto y una vez que sus neumáticos tomaron temperatura, inició la remontada. Uno a uno fue devorando rivales y en la vuelta 12 ya se encontraba detrás de Lewis Hamilton (Mercedes) por la octava colocación. Una vez que superó al británico, quedaban por delante Esteban Ocon (Alpine), Charles Leclerc (Ferrari), Carlos Sainz (Ferrari), Lance Stroll (Aston Martin), Russell y la dupla Pérez – Alonso.

 

 

Ferrari buscó adelantarse en el clasificador. Con Leclerc remontando y Sainz luchando por el cuarto lugar con Stroll se apeló a la estrategia. Maranello buscó un overcut engañando al box de Aston Martin. En la vuelta catorce llamaron a Sainz para el cambio de cubiertas. La escuadra de Silverstone creyó que buscaban el undercut y llamaron a Stroll. Cuando el español pasó de largo, Aston Martin comprendió que le tendieron una trampa. En el giro 16 ingresaba Sainz y retornaba a pista por delante del canadiense.

 

Pero la estrategia de Ferrari fue arruinada por el Safety Car dos vueltas más tarde. El coche de Stroll se detuvo en la curva trece por problemas mecánicos. La neutralizción abrió la ventana para que Pérez, Alonso, Russell y Verstappen hicieran sus pit stop.

 

El auto de seguridad favoreció al holandés. Con neumáticos duros, al igual que sus tres oponentes que tenía por delante, estaba en igualdad de condiciones para buscar el triunfo. Con bandera verde en la vuelta 21, necesitó cuatro giros para saltar del cuarto al segundo lugar.

 

 

Verstappen comenzó a recortar la diferencia con Pérez. Sin embargo, el mexicano dio pelea a su compañero. Entre los dos se bajan los parciales. Ambos apretaban a fondo. Ninguno estaba dispuesto a ceder.

 

El resto de la carrera fue otro monologo de Milton Keynes. Detrás, los Mercedes se mostraron más veloces que las Ferrari que no podían recortarles diferencia. Además, hubo un interesante duelo por el décimo lugar entre el Haas de Kevin Magnussen y el AlphaTauri de Yuki Tsunoda. Finalmente, el danés le ganaría la posición asegurando el primer punto para el equipo.

 

Los Alpine mantuvieron el buen nivel mostrado a lo largo del fin de semana. Esteban Ocon (octavo) y Pierre Gasly (noveno) aportaron seis valiosos puntos para el campeonanto de constructores aprovechando el derrumbre de los Alfa Romeo y la baja performance de los McLaren que deambularon por las últimas posiciones.

 

Pérez cruzó la meta consiguiendo su quinta victoria en la Fórmula Uno (la cuarta en un circuito callejero). Mientras que Verstappen buscó que la felicidad no sea completa para su compañero. Realizó un stint en el último giro quitándole el record de vuelta. Con el punto extra, el holandés lidera el campeonato por una unidad por encima del mexicano.

 

 

Pero Jeddah dejó una polémica. Fernando Alonso, en una carrera planteada con inteligencia, arribó en tercer lugar. Subió al podio a recibir su trofeo y cuando bajó se enteró que había perdido la posición por un recargo de diez segundos.

 

Cuando el español cumplió su penalización de cinco segundos en el pit stop, el mecánico que operaba el gato trasero rozó accidentalmente la parte posterior del coche antes de cumplirse el tiempo (en ese lapso no se puede tocar el vehículo). Mercedes vio la falta y los comisarios no lo percibieron. Tras el reclamo, la FIA revisó las imágenes constatando la infracción. El asturiano cayó a la cuarta posición y George Russell escaló al tercer puesto. La sanción lo privó de su podio número 100.