El holandés sufrió un trompo sobre el final de la práctica pero no le impidió ser el más rápido en la mañana de Melbourne.
Max Verstappen (Red Bull) fue el más rápido en el primer entrenamiento que se desarrolló en el trazado del Albert Park en Melbourne. Fue un accidentado inicio de actividad donde los despistes, una falla de sistema y dos banderas rojas marcaron el ritmo de la mañana australiana.
La pérdida de señal del GPS de los coches dejó sin datos de ubicación a los equipos. Esto ocasionó que desde el pit wall no pudieran advertir a los pilotos sobre los vehículos que circulaban a baja velocidad y se topaban de golpe con ellos. Dirección de Carrera, por seguridad, paralizó la práctica durante ocho minutos hasta que se reestableciera el sistema.
A esa altura, Verstappen era el dueño de la sesión matutina. Con los neumáticos suaves marcó 1:18.790s. Poco pudo hacer su compañero de equipo. Sergio Pérez no pudo bajar el medio segundo de diferencia y finalizó en tercera posición. Para colmo, sobre el final, Lewis Hamilton (Mercedes) sorprendió con el W14 y se quedó con el segundo mejor registro a 0.433s del holandés.
Sin embargo, el campeón tuvo un susto. A menos de diez minutos que finalizara la tanda, pisó el piano de la curva cuatro e hizo un trompo. El Red Bull no sufrió daños, pero el incidente le costó un juego de neumáticos blandos.
Otro que también tuvo un despiste, aunque más aparatoso, fue Yuki Tsunoda. En la primera curva se fue de cola el AlphaTauri realizando un trompo que hizo saltar el coche sobre la grava y el pasto. Final de la PL1 para el nipón que tuvo que llevar el auto a boxes para revisión.
No solo Verstappen y Tsunoda padecieron los rigores de las variantes de Melbourne. Kevin Magnussen y Nico Hulkenberg se despistaron con los Haas, Pérez se pasó en la curva cuatro y Hamilton sufrió un sobreviraje en la nueve que pudo controlar con nervios de acero.
Fernando Alonso (Aston Martin) se ubicó en cuarto lugar dejando atrás a las Ferrari de Charles Leclerc y Carlos Sainz que siguen a la deriva.
Una de las sorpresas fue Lando Norris. Alcanzó la séptima posición con un McLaren que tuvo inconvenientes en el inicio de la actividad. Tras una revisión a contrareloj del box, pudo salir a pista y darle un respiro a Woking.
Pierre Gasly (Alpine), George Russell (Mercedes) y Lance Stroll (Aston Martin) completaron el Top Diez en una sesión que finalizó con bandera roja por la detención del Williams de Logan Sargeant. El norteamericano tuvo problemas de potencia y abandonó en las proximidades de la curva once.