El holandés marcó el mejor tiempo en el último libre. Zhou se accidentó en la curva 5 y el Sauber quedó con múltiples daños. Bearman, que reemplaza a Sainz, finalizó décimo.
Max Verstappen dominó el último entrenamiento con miras a la clasificación para el Gran Premio de Arabia Saudita que se realizará este viernes en el circuito de Jeddah.
El holandés de Red Bull marcó el mejor tiempo con 1:28.412s, superando por +0.196s a la Ferrari de Charles Leclerc. Tercero se ubicó su compañero Sergio Pérez a +0494s de la punta.
Los diez primeros quedaron encerrados dentro del segundo, pero entre el actual campeón y el monegasco solo dos décimas los seperan. Algo que anticipa un duelo muy apretado por la pole.
El momento de mayor dramatismo de la PL3 tuvo como protagonista a Zhou Guanyu. El chino perdió el control del Sauber cuando ingresaba a la curva 4. El coche dio un trompo y se estrelló contra las defensas de la curva 5.
El piloto salió ileso pero fue llevado a revisión médica. Mientras que el C44 quedó parcilmente destruído.
La práctica se detuvo con bandera roja para cambiar un panel Tech Pro que se dañó por el impacto. Cuando faltaban seis minutos para el final (el reloj no se detiene en los entrenamientos) se habilitó la pista.
Todas las miradas se centraron en el joven Oliver Bearman. El británico, actual piloto de F2 y reserva de Ferrari, reemplazó a Carlos Sainz que fue operado de urgencia por un cuadro de apendicitis que se le detectó en las últimas horas.
Bearman, como era de esperar, aprovechó toda la tanda y giró la mayor cantidad de vueltas posibles para adaptarse al SF24. De las 21 vueltas que dio (el que más rodó junto con Valtteri Bottas) su mejor tiempo fue 1:29.306s que lo ubicó décimo a +0.894s de Verstappen y a +0.698s de su compañero Leclerc.