La escudería austriaca develó el monoplaza con el que buscará retener los títulos de pilotos y constructores. “Es una evolución del coche del año pasado, obviamente, y es nuestra versión número 20”, señaló Horner.
Red Bull cerró la temporada de presentaciones. En el anochecer del miércoles develaron el modelo RB20 con el que Max Verstappen y la escudería austriaca defenderán los títulos de pilotos y constructores.
El lanzamiento se realizó en el renovado auditorio del Red Bull Technology Campus en Milton Keynes. Ante más de 350 aficionados, socios comerciales y periodistas acreditados; el campeón Verstappen, Sergio Pérez y Christian Horner mostraron al mundo el nuevo monoplaza (aunque se conocían fotografías tomadas clandestinamente en el shakedown del martes pasado en Silverstone).
Horner destacó el trabajo del equipo asegurando que “no se han quedado quietos, no son conservadores y se puede ver que han sido bastante agresivos en ciertas áreas y siguen superando los límites”. “Es una evolución del coche del año pasado, obviamente, y es nuestra versión número 20”, agregó.
“Se puede ver que todos los hombres y mujeres detrás de escena han estado trabajando muy duro [en el RB20] y algunos de los detalles del auto son absolutamente exquisitos”, remarcó el director de equipo.
Max Verstappen dijo que el coche “se ve un poco diferente” y expresó su deseo que llegue la pretemporada en Bahrein para “probar y ver realmente de qué es capaz el coche”.
“Creo que el equipo definitivamente avanzó bastante con respecto al año pasado y creo que eso es muy positivo”, agregó el actual campeón.
Por su parte, Sergio Pérez coincidó con su compañero. Señaló que “se nota que el equipo ha hecho un trabajo increíble”.
“Me parece fantástico que Red Bull haya tenido un coche tan dominante el año pasado y que hayamos cambiado completamente nuestro concepto. Es algo que creo que requiere mucha hambre en el equipo, para seguir superando todos los límites. [Será] interesante ver cómo todo va por buen camino”, subrayó el mexicano.
La ceremonia también contó con la presencia de David Coulthard. Con motivo de la presentación del vigésimo modelo de Red Bull, el escocés fue invitado especialmente por ser el primer piloto en alcanzar un podio. Fue el 28 de mayo de 2006, cuando logró el tercer lugar en el Gran Premio de Mónaco, con el RB2 impulsado con un motor Ferrari Tipo 056 V8.