Sobre el final de la Q3, Sainz se encontró en Portier con el coche cruzado de Pérez y no pudo evitar la colisión. A pesar del incidente, se quedó con el segundo lugar de partida.
Carlos Sainz alcanzó el segundo lugar en la clasificación del Gran Premio de Mónaco. Sin embargo, su Qualy finalizó un minuto antes de la bandera a cuadros al quedar envuelto en el accidente de Sergio Pérez en Portier que originó la bandera roja que dio por terminada la actividad.
“En general, P2, es una posición decente para comenzar el domingo y es un buen día para el equipo con otro bloqueo de primera fila y una buena oportunidad para sumar puntos sólidos mañana. ¡Vamos a correr!”, dijo el español a la prensa.
“Fue -dijo- una gran preparación durante la clasificación de hoy, especialmente hasta la Q3, cuando desafortunadamente las cosas se complicaron un poco”.
“En mi primer intento [en Q3] tuve que adelantar a los dos Mercedes durante mi vuelta rápida y dejé un par de décimas en la tabla, especialmente adelantando”, explicó y añade: “Sin embargo, tenía confianza para el segundo intento hasta que, obviamente, Pérez se estrelló frente a mí. Hice todo lo que pude para reaccionar rápido y evitar el choque, pero ya era demasiado tarde. Cosas así pueden pasar en Mónaco y desafortunadamente me vi atrapado en eso otra vez”.
Sergio Pérez perdió el auto al bajar muy rápido por Mirabeau. Cuando giró a la derecha en Portier se fue de cola y golpeó las defensas que se encuentran en el paseo costero. Sainz, que venía detrás de él, se topó con el Red Bull cruzado y lo obligó a hacer una brusca maniobra para evitar un choque frontal. La Ferrari del español hizo un semi trompo y la rueda trasera izquierda golpeó la parte delantera del coche del mexicano.
“Venía de una esquina ciega que era la curva 7 [Mirabeau Bas], acelerás a fondo desde la curva 7 y cuando entré por mi lado izquierdo pude ver una bandera amarilla”, dijo Sainz.
“Inmediatamente, cuando me di cuenta de que era una bandera amarilla, vi que el coche que tenía delante se había estrellado”, rememora y agrega: “No ves dónde se había estrellado, entrás en la esquina [Portier] sin saber dónde va a estar, así que solo frené”. Señaló que intentó hacer el radio de la curva “lo más cerrado posible”. “Justo cuando iba a lograr evitarlo, pisé un poco más el freno y lo golpeé con la parte trasera de mi auto”.
“Todos los años, en Mónaco, parece una tradición que alguien se estrelle delante de mí y no pueda completar la vuelta que normalmente es la vuelta más emocionante en Mónaco”, comentó Sainz con un toque de ironía.