El español finalizó quinto luego de remontar desde la penúltima posición en una estresante carrera. Un error de Ferrari en la primera detención arruinó sus opciones de podio.

 

Carlos Sainz es el piloto del día. Y no por el voto telemático de las redes sociales que le otorgaron esa distinción. Su Gran Premio de Francia estuvo plagado de retos, ocasionados por Ferrari, que debió sortear. Incluso, aún con los contratiempos, tenía posibilidades de alcanzar el podio.

 

Partió desde el penúltimo lugar, hizo diecinueve rebases a lo largo de la carrera, lidió con un error del equipo durante el pit stop, tuvo una penalización de cinco segundos y nunca perdió el hambre por integrar la Troika de Paul Ricard.

 

“Ha sido una buena remontada. Una pena tener ese neumático medio después del Safety Car, que creo que nos ha puesto en esa duda de si parar o no parar”, comentó el español a la cadena DAZN.

 

 

La segunda detención fue el mayor dilema para Maranello. Los neumáticos medios, que calzaba desde la vuelta dieciocho, estaban en el pico de su vida útil. Hacer o no el pit stop era el interrogante. Sainz estaba cuarto y tenía a tiro a Sergio Pérez por la tercera posición. Cómo en Mónaco, tuvo una seria discusión con el Pit Wall por la estrategia a seguir. El box quería que entrara y el español continuar, a todo o nada, hasta el final. Como aditivo, el debate ocurría cuando estaba rueda a rueda con el mexicano -a quién rebasó-.

 

“Al final hemos tomado la decisión segura, que era parar en vez de quedarnos sin rueda al final, que habrá que analizarlo con calma, a ver cuál era la mejor opción”, explicó sin ocultar el fastidio. La posibilidad de quedarse con las manos vacías eran altas. Con las gomas desgastadas, hipotéticamente, podría haber terminado en la misma posición que finalizó. Sin embargo, el menor contacto con algún elemento, por más pequeño que sea, podría reventar el neumático. Un riesgo que no debían correr tanto el piloto como el equipo.

 

“En el coche tenía una impresión diferente, pero el equipo tiene muchos más datos que yo para tomar la decisión que ha tomado y seguro que con sus datos habrá tomado la decisión correcta”, dijo.

 

 

Las posibilidades de podio se redujeron varias vueltas antes, más precisamente en la dieciocho. La demora en el pit stop casi termina en un grave accidente. El Williams de Alex Albon, que tenía prioridad de paso, casi lo embiste cuando la Ferrari fue autorizada a salir. Además, de ocurrir la colisión, podrían haber atropellado a los mecánicos de McLaren que estaban preparados para recibir a uno de sus coches.

 

El incidente fue penalizado con cinco segundos por “Salida Peligrosa” y complicó las aspiraciones de un Top Tres. El propio Sainz lo reconoció: “Quizá sin ese mal pit stop y con un poquito más de suerte podríamos haber acabado en el podio. Por eso igual estaba un poco frustrado, pero luego cuando lo analizas con calma hay que hay que conformarse con ese quinto puesto, que es una buena remontada”.