En Imola, Yuki Tsunoda condujo por primera vez en un coche de Fórmula 1, acelerando un Toro Rosso 2018. A pesar de disfrutar del viaje, el piloto japonés se quejó de muchos dolores de cuello.
Yuki Tsunoda completó su primera prueba en la Fórmula 1 el miércoles pasado (4) en Imola. El piloto de Fórmula 2 y el programa juvenil de Red Bull aceleraron el Toro Rosso STR13 2018 en el circuito italiano.
La prueba aumenta la posibilidad de que Tsunoda se una a AlphaTauri próxima temporada, junto con el ya confirmado Pierre Gasly, en sustitución de Daniil Kvyat. El piloto japonés completó más de 300 kilómetros, requeriemiento solicitado por la FIA para la superlicencia, además de estar en el top 5 de la F2 esta temporada.
Durante la mañana, la pista mojada sacó al piloto de las actividades. Horas más tarde, en seco, Tsunoda hizo giros rápidos y probó el ritmo de carrera en Imola . Tras la sesión, dijo que el coche es más fácil de conducir de lo que esperaba, pero destacó la dificultad en la parte física.
“Pilotar fue fácil, pero físicamente difícil. Esperaba que fuera menos complicado en el aspecto físico, sobre todo en el cuello. En la Fórmula 2 no siento mucho dolor en el cuello, es muy fuerte ”, dijo .
“Me resultó muy difícil frenar. La fuerza de frenado es mayor de lo que imaginaba, necesito mucho entrenamiento hasta, quizás, la próxima temporada o el próximo evento que correré en la Fórmula 1. La experiencia de entrenar en el simulador de Red Bull me ayudó mucho a tomar ritmo muy rápido. , al final del entrenamiento fui consistentemente rápido. Incluso en la simulación de carrera, los tiempos fueron constantes ”, agregó Tsunoda.
La expectativa es que Tsunoda vuelva a aparecer en acción en la prueba de jóvenes pilotos de Fórmula 1 en Abu Dhabi el próximo mes. Yuki es favorito para ocupar el lugar del equipo en 2021, pero el jefe Franz Tost dijo que la elección la tomará su desempeño en la Fórmula 2, no la presión de patrocinadores como Honda.