Destacó los logros que alcanzaron con la marca japonesa que se retira de Red Bull a fin de año. Además, señaló que la temperatura de la pista lo ayudó con la gestiól del neumático.
Max Verstappen consiguió este domingo su cuarta victoria en el circuito de Suzuka. El actual campeón sorprendio -al igual que en la pole del sábado- con un triunfo que no estaba en los papeles.
En su primera gema del año derrotó a los poderosos McLaren de Lando Norris y Oscar Piastri. Lo que agiganta más la hazaña teniendo en cuenta que el RB21, por el momento, es un coche inferior al MCL39 de los papaya.
En el parque cerrado señaló que fue una carrera dura para él. “Estaba presionando muchísimo, sobre todo con el último juego de neumáticos”, dijo a F1TV. Además, reconoció que los de Woking lo presionaron mucho, pero “fue muy divertido”.

“No es fácil, por supuesto, gestionar los neumáticos, pero estoy increíblemente contento. Empezó bastante difícil este fin de semana, pero no nos rendimos, seguimos mejorando el coche y hoy estuvo en su mejor momento. Claro que salir desde la pole realmente nos permitió ganar esta carrera”, comentó.
Sobre las condiciones de pista señaló que la temperatura también lo ayudó: “Los neumáticos se sobrecalientan menos cuando la pista está más fría”.
Al ser consultado sobre lo simbólico de la victoria en la casa de Honda -a fin de año finaliza el vínculo con Red Bull y se asociará con Aston Martin– dijo que lo tuvo presente en las últimas vueltas. “Tenía que intentar mantenerme por delante; sería una gran historia para nuestra última carrera de despedida con Honda aquí en Japón”. También remarcó que se siente orgulloso de los logros que alcanzaron juntos. “Es una despedida perfecta”, concluyó.