Partirá desde la pole en la primera carrera Sprint de la temporada. “La pista estaba muy resbaladiza, fue difícil hacer que los neumáticos funcionaran bien”, señaló.

 

Max Verstappen logró la pole en una clasificación muy complicada en Imola con cinco banderas rojas. El campeón se aseguró el primer lugar para la carrera Sprint del sábado y relegó al segundo puesto de la parrilla al líder del campeonato Charles Leclerc.

 

El neerlandés terminó la jornada más relajado. Como si le hubieran sacado una carga pesada de sus espaldas. “Conducir hoy fue complicado. Hubo lluvia, luego seco, luego más lluvia. La pista estaba muy resbaladiza, fue difícil hacer que los neumáticos funcionaran bien”, declaró para la televisión luego de la Qualy.

 

Fue un día muy complicado para todos los pilotos. Las lluvias que azotan a la región de Emilia – Romagna cumplen los pronósticos que se manejaban desde el inicio de la semana. Se aguarda que el aguacero vuelva a decir presente entre la segunda práctica del sábado y la Sprint.

 

 

“El circuito es fantástico y te castiga mucho si te equivocas, puedes acabar contra la pared y a los pilotos nos gusta porque es más difícil”, comentó.

 

“Nos hace la vida más difícil. Estoy satisfecho con la pole, sé que mañana y el domingo serán muy diferentes a partir de las condiciones climáticas , pero es un buen comienzo para el fin de semana”. Y añade Verstappen: “¿Imola un reinicio para nosotros? Las primeras carreras pasaron. No iremos según lo previsto pero intentaremos hacerlo bien aquí”.

 

El campeón necesita recuperar el terreno perdido con dos abandonos en su haber -Bahrein y Australia-. Pero es consciente que no es ventaja partir primero si la lluvia se presenta durante la carrera Sprint.  Además,  todo Red Bull ruega que el motor del RB18 no le juegue otra mala pasada.