Williams realizó un análisis de todo lo sucedido en el Gran Premio de la Emilia Romagna, en el que pintaba destacar durante los tres días de actividad, pero ambos autos se vieron involucrados en accidentes que provocaron el quedar fuera de la carrera y retirarse sin puntos.
Dave Robson, Jefe de Rendimiento la escudería inglesa, declaró que fue un fin de semana con sentimientos encontrados porque pudieron haber aprovechado el error del japonés, Tsunoda, en la clasificación para quedar lo más adelante en la parrilla.
“La clasificación no podría haber sido mucho mejor. Obviamente, Tsunoda cometió un error, que fue un regalo para nosotros, pero por lo demás todos los puestos que conseguimos fueron por méritos propios. El pensamos que teníamos una buena oportunidad de sumar puntos”.
“Las condiciones mixtas de la salida no eran las ideales, pero creo que nos las hemos tomado con calma y hemos tomado buenas decisiones, terminar sin nada es, obviamente, muy frustrante. Lo único positivo es que el coche estuvo bien, el ritmo fue bueno. Al menos el accidente se produjo como resultado de que atacamos, y de todos los coches para atacar fue contra un Mercedes, que es algo que no hemos sido capaces de hacer durante mucho tiempo”.
A pesar del caos vivido en Imola, la escudería de Grove tiene la esperanza de sumar puntos a lo largo del año y terminar con la sequía que tienen desde 2019. Robison señaló que el funcionamiento del FW43B.
“No sé si estoy siendo demasiado optimista, pero estoy contento porque el auto va bien. No diría que soy optimista para todas las próximas carreras, pero definitivamente estoy contento de ver que se comportó mejor aquí (Imola) y sé que tenemos algunas oportunidades por delante otras en donde deberemos trabajar más para lograr los resultados que queremos”.